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Canarias 29 de Enero de 2016
21pacientes han sido operados con la técnica de cirugía robótica asistida con neuronavegador
Para realizar este tipo de cirugías, con un alto nivel tecnológico, hay que contar con un equipo multidisciplinar que permite una mejora en la atención de las patologías más complejas.

El doctor Ángel Ramos, jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Complejo Hospitalario Universitario Insular Materno Infantil, centro dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, el doctor Daniel Pons, jefe de Neurocirugía del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria; y el doctor José Ramón Vasallo, responsable del área de Rinología del Servicio de Otorrinolaringología; informaron, ayer jueves 28 de enero, sobre la cirugía robótica asistida con neuronavegador.

Esta técnica se ha realizado con éxito en el centro hospitalario a un total de 21 pacientes con  tumoraciones de nariz y senos paranasales así como la intervención de tumores hipofisarios, donde, hasta la introducción de estas técnicas, se producían grandes defectos estéticos y secuelas derivadas de los grandes abordajes que se realizaban.

La cirugía robótica con neuronavegador facilita la localización exacta del tumor, combina la imagen radiológica y la endoscópica a tiempo real y es útil en la localización de grandes tumores que requieren una gran precisión quirúrgica.

Para la exacta localización se incorpora un complejo sistema de codificación de imágenes y reconstrucciones radiológicas mediante tomografía axial computarizada y resonancia magnética. 

La creación de un campo magnético de control en el área de la cabeza del paciente  permite que el cirujano pueda realizar extirpaciones más complejas, incluso en tumoraciones que invaden la base del propio cráneo.

Para realizar este tipo de cirugías, con un alto nivel tecnológico, hay que contar con un equipo multidisciplinar que permite una mejora en la atención de las patologías más complejas.

Este tipo de intervenciones ofrece a los pacientes menos efectos secundarios, menor morbilidad, una importante reducción de las complicaciones y menor invasión a nivel anatómico.

Además, la estancia media de los pacientes, después de la operación con este tipo de técnica, se reduce un diez por ciento respecto a la intervención de grandes abordajes.