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Arona 19 de Enero de 2016
Los políticos mientras
hablen, que hablen,
que hablen (Jesús Hermida)
El abuelo con el bastón llamó al nieto en los tiempos
de matanza en el campo y granja. Cuando llega su
nieto, el abuelo pide que entre al gallinero (donde
también viven los conejos), para que mate a tres conejos y la abuela los prepare en salsa o fritos, como más guste, pero el nieto niega cogerlos porque dice que es muy difícil ya que corren mucho. El abuelo tiene trucos diciéndole que por la noche es más fácil si utiliza una linterna para encandilar a los conejos y así quedan inmóviles, pero el nieto insiste en no querer cumplir el deseo de su abuelo.

El abuelo enfadado grita al nieto que se acerque a su vera para darle una colleja, pero el nieto sabiendo que el abuelo no puede casi ni caminar, no se acerca y se va a jugar con sus amigos y lógicamente abusa porque es mayor,  sino el abuelo correría detrás de él y le daba dos tortas.

Su nieto riendo decide irse con sus amigos a jugar todo el día y llega a casa cuando el abuelo duerme plácidamente, pero cuando son las seis de la mañana y el nieto estaba soñando con pajaritos, siente una hostia del bastón en todas sus piernas que dejó las marcas durante una semana y el abuelo le dijo, “Si encandilas a los conejos te ahorras correr detrás de ellos”.

El nieto logró coger los tres conejos en el mismo día y aprendió que el abuelo era más inteligente y sabía que si otro día incumplía ordenes tendría otro bastonazo por abusador.

¿Cómo estás querido lector? Espero que estés bien y feliz como siempre. Hoy la carta bautizada con el título de “Mucha Mierda” está inspirada justamente en la actitud positiva y cuando somos positivos, hasta la mierda es linda. Mucha mierda nos dicen algunos cuando vamos a subir a los escenarios y estas palabras vienen de las ferias de Sevilla, porque si había mucha mierda en las calles, es porque vinieron muchos caballos y el éxito estaba asegurado.

La mierda de las vacas, cabras, ovejas, cabras o gallinas con el tiempo cambiaron el nombre por estiércol, porque suena mucho más light y más adelante pasó a llamarse materia orgánica, que todavía suena mucho mejor. En otras ocasiones he dicho que la mierda o el estiércol tiene su puesto señalado, porque el estiércol ayuda a que las frutas y verduras crezcan de la mejor calidad y tamaño. Incluso las opiniones negativas del exterior hacia uno mismo, podrían ser estiércol educativo porque ayudan a ser mejor persona si es que reconocemos sus verdaderas razones.

Cuando hablamos de que la política es una mierda, es porque nosotros mismos permitimos que sea así, pero nosotros somos cómplices de dicha política sino luchamos por cambiar el sistema.
Hubo un periodista profesional que hacía programas en televisión de cuatro horas, Jesús Hermida, en paz descanse, todo un profesional y además las cuatro horas pasaban muy rápido, porque era un máquina comunicando y recuerdo una frase inolvidable sobre los políticos, “Mientras hablen, que hablen, que hablen” y sentado en su sillón dando vueltas a su reloj de bolsillo con la cadena.

Espero que esta carta les haga reflexionar en el sentido positivo porque viendo las cosas con buenas actitudes, seremos más felices. Perdonen las palabras mal sonantes y gracias por regalarme parte de vuestro tiempo, el tesoro más valioso del ser humano medianamente inteligente. Un abrazo.

Juan Santana