Publicidad
Si desea que esta noticia aparezca publicada en facebook, escriba en la casilla "publicar" y haga click en "Publicar en facebook". Estará disponible en la red social a partir de un deteminado tiempo.
Para comentar esta noticia acceda a nuestra página en facebook
Queda terminantemente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos ofrecidos a través de esta página web, salvo autorización expresa de eldigitalsur.com. Asimismo, queda prohibida toda  reproducción a los efectos del artículo 32,1 párrafo segundo, Ley 23/2006 de la Propiedad Intelectual.
eldigitalsur.com no se hace responsables por la opinión emitida por los colaboradores.

Canarias 23 de Mayo de 2015
El 85% de los pacientes con epilepsia pueden conseguir una vida normal con el tratamiento farmacológico adecuado
La epilepsia es la segunda enfermedad neurológica más frecuente en España, después de la cefalea, con una incidencia de 30-50 casos nuevos por cada 100.000 habitantes.

El Grupo Hospiten, con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Epilepsia que se celebra este domingo 24 de mayo, recuerda la necesidad de que los pacientes que presentan esta enfermedad estén controlados de forma continua con un tratamiento específico para poder vivir con normalidad.
La epilepsia es la segunda enfermedad neurológica más frecuente en España,
después de la cefalea. Cada año se detectan entre 12.000 y 22.000 nuevos casos, según la Sociedad Española de Neurología. Asimismo, es una enfermedad caracterizada por la aparición de crisis debido a una actividad neuronal cerebral excesiva o síncrona de causas diversas como hereditarias, alteraciones en el desarrollo prenatal, lesiones cerebrales, entre otras, pudiendo tener consecuencias neurológicas, mentales, psicológicas y sociales.

En este sentido, la neuróloga de Hospiten Bellevue, Clara Sainz, explica que “es fundamental un seguimiento constante del tratamiento para evitar la aparición de las crisis. De hecho, en torno al 85 % de los pacientes logra tener una vida libre de crisis gracias a un seguimiento específico y continuado por parte de los especialistas, con la incorporación de los fármacos adecuados. En el resto de los casos, suele tratarse de enfermos con una epilepsia muy resistente donde debe optarse por alternativas como la cirugía para reducir el número de crisis”.

La doctora Sainz también aclara que en los últimos años se ha avanzado considerablemente en la incorporación de nuevos fármacos que son mucho más sencillos de tomar y que buscan facilitar la adherencia a los tratamientos por parte de los pacientes. Asimismo, reducen considerablemente los posibles efectos adversos que se suelen presentar a largo plazo con el seguimiento prolongado de este tipo de medicamentos, como por ejemplo la osteoporosis, problemas hepáticos o la subida de peso, entre otros.

“Si bien los familiares y personas más allegadas a los pacientes suelen estar familiarizados con la epilepsia, siempre es importante generalizar y profundizar en las pautas de actuación en el caso de que manifiesten alguna crisis para ayudar en la seguridad y en la propia salud de los afectados”, añadió la especialista de Hospiten.

Finalmente, recuerda “que hay que valorar adecuadamente a las personas con epilepsia, establecer qué tipo de crisis presenta e instaurar el tratamiento más adecuado para cada caso, que le permita el control total de crisis, sin efectos adversos y sin repercusión en la calidad de vida”.