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Canarias 5 de Febrero de 2015
El profesorado de Tecnología de Secundaria preocupado por la aplicación de la LOMCE
el próximo curso
Manuela Armas, viceconsejera de Educación y Universidades, transmitió
al colectivo la decisión del Gobierno de aminorar las consecuencias
de la aplicación de dicha ley en Canarias.

El colectivo de Profesores de Tecnología de Enseñanza Secundaria entregó ayer a la viceconsejera de Educación y Universidad del Gobierno de Canarias, Manuela Armas Rodríguez, una serie de propuestas de posibles soluciones a la problemática que se le plantea ante la inminente aplicación de la LOMCE, el próximo curso escolar, en los niveles de 1º y 3º de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Algunas de las Comunidades Autónomas del resto de España trabajan ya en distintas propuestas según informa el colectivo.

Estas propuestas, que en las próximas semanas se irán ampliando, según informa el colectivo afectado, pretenden sirva a la Consejería de orientación para la regulación de estos estudios en Canarias, situación que como ya expresó Manuela Armas en una reunión que tuvo con ellos el pasado mes de mayo, intentará paliar en todo lo que esté en su mano.
Manuela Armas se comprometió también a informar al colectivo de Profesores de Tecnología de los avances en esta regulación en un intento de construcción colaborativa.

Las propuestas aportadas por los docentes se centran en el mantenimiento de la carga lectiva actual, que es de nueve horas en la etapa. En caso de que esta disminuya proponen que se regule, por orden o circular de la Consejería, que la carga horaria de los ámbitos técnicos tanto de la Formación Profesional Básica como de los Programas de Mejora de los Aprendizajes que se configuren en la nueva ley, sean asignados preferentemente al Departamento de Tecnología, con el objetivo de dar estabilidad a las plantillas actuales.

Por último, proponen crear un grupo de trabajo formado por la Inspección educativa, Dirección General de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa y representantes del colectivo que sirva para hacer un estudio con datos reales de cómo quedan afectados las plantillas, así como las posibles soluciones a la hora de configurar la presencia de la Tecnología en la etapa.