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Arona 2 de Marzo de 2015
Mal ejemplo político
Se acabo aquello que sin muchas ganas la ciudadanía
ha tenido que presenciar en ese Hemiciclo del Congreso
de los Diputados las sesiones del “Estado de la Nación”.
Sin lugar a dudas se colaboró y mucho a enterrar el Bipartidismo por parte, más que sabida, de que para Rajoy, este debate fue delirante, nadie esperaba de que tuviera ese ritmo que él mismo imprimió enseguida que abrió la sesión, él mismo ya dio de entrada la pauta para que aquello acabara como un “guirigay”, entre abucheos, insultos, banderas, gritos, todo un zoco de verduleras, que es lo que pareció en ese momento el Congreso.

Mariano Rajoy se pasó de frenada con el Partido Socialista liderado por Pedro Sánchez, que tuvo de entrada que soportar toda clase de improperios que el Presidente del PP le otorgaba al Partido de la oposición, Rajoy pretendió dar una magistral clase de lo que es saber gestionar un País, sacó pecho con el tema más que manido del rescate, sabiendo que ya la opinión pública no entra en esa comunión, pero sigue con sus trece y de ese machito no lo baja nadie.
El Presidente de entrada ya dio un buen repaso recordando a Pedro Sánchez los problemas internos que tiene el PSOE y para extenderse algo mas también le enumeró los problemas externos del Partido. Fue algo anormal, pues el ciudadano lo que quería escuchar realidades, no eran esos avisos fuera ya de tiempo que le recordaba Rajoy al PSOE, el ciudadano quiere saber cómo está actualmente el país, qué soluciones tiene previsto el Gobierno para poder atajar todo este enjambre de desgracias escalonadas y que están sin ver una solución con el paro que actualmente campea a su antojo por España, esa es una de las grandes preguntas que necesitan urgentemente una respuesta, y no la monserga aprendida del “y tu mas”.

El discurso del Presidente fue decepcionante, luego se animó algo cara a los Partidos minoritarios en donde él se encontró fuerte y atendió muy ufanamente cuando entró a dar las réplicas, eso solo fue para el amplio abanico de las segundas divisiones políticas. Pero en el principio como ya hemos apuntado frente a la oposición del PSOE, su comparecencia fue pésima y sin ninguna calidad política, manejó a todo trapo los ataques personales, estando en una línea mas que bronca en todas sus formas, no hubo titubeo de querer arreglar el entuerto que él mismo había creado. Fue sin excusa alguna, un debate sucio.

La opinión pública le ha dado la puntuación de este "Estado de la Nación" como el más puro perdedor, fue derrotado por varios K.O, no supo estar a la altura de un Presidente de la Nación, K.O en no saber comunicar la verdad de lo que el español quería oír, no "cantinfladas" en donde parece que se encuentra muy cómodo Rajoy, así que para acabar este aquelarre de desprecios e insultos cerro su turno diciendo refiriéndose al Líder del PSOE "No vuelva más a estar aquí a decir nada, ha sido patético". Al decir la palabra patético se definió él y salpicó a su Partido. Esto no ha gustado a muchos de sus barones y gente que ya empieza a ver a Rajoy como algo a cambiar y que posiblemente con Rajoy no se llegue a ganar estas Elecciones, ese es el mal sabor que tiene en estos momentos Génova a unos días después de esa derrota de Rajoy, que le han dado una puntuación de 4,7, eso le tendría que hacer pensar que después de tantos años en política, mas cuatro de Presidente, venga (según él) un novato arribista de la política y le vapulee, eso es para hacérselo mirar.

Salvador Barnes
doropress@gmail.com