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Arona 23 de Enero de 2015
Baches por doquier
Sin lugar a dudas esto empieza a ser cargante,
por la repetición monótona que hace la Dirección
General de Tráfico, aparte de pretender ser más
que paternalista y de tratar de decirle al ciudadano alocado que tiene coche, que conduzca con más sentido de la responsabilidad, dando tal y cual consejo, que es siempre agradable y se agradece, pero deben de ser ellos los primeros en dar ejemplo.

Siguen diciendo que en lo que va de año hemos duplicado los muertos en carreteras, comparándolos con los que se tuvieron el año pasado en las mismas fechas.

Entonces salen los expertos y rápidamente ya vaticinan que esto pasa porque el conductor puede ir, borracho, o drogado o en un exceso de velocidad alarmante, ¡fantástico!, se salen por la tangente porque no tienen la grandeza y no toleran de que alguien les diga que eso que dicen no es toda la verdad, es solo un 40% si es que llega a serlo de todo lo que pasa en nuestras carreteras.
Si se circula mas por las carreteras interiores, es porque en los sitios en donde hay autopistas de peaje, estas valen un precio abusivo, si tuvieran unos precios normalizados para la época en que estamos y con la carestía que se tiene económicamente, el conductor usaría mas la autopista que es inmensamente más segura y está en condiciones para poder circular por ella, pero como son de precios abusivos e intocables, habiéndose pagado ya cuatro veces lo que costó, el usuario no tiene más remedio que buscar las carreteras comarcales de este País que son una imitación de las que puede tener todo Centro África en las salidas a las sabanas.

En Tenerife tenemos las carreteras de vómito puro, a nadie se le cae la cara de vergüenza de tener unas comunicaciones para ir en camellos, no para ser un país en donde tanto se cacarea de que somos de primer orden. Baches que cabe una rueda, el asfalto con unos escasos 5 milímetros de grosor, sin señalizaciones que sean adaptables a la visión del conductor, un aquelarre en discos de prohibición y limitaciones de velocidad, "guardias muertos" que tienen más altura de lo legislado, y que hace polvo el coche, excesos de curvas con innumerables puntos negros en donde la gente se mata cada día más, sin que a nadie le importe lo más mínimo, lo único que saben hacer es dar por el cerote al usuario recordándole lo torpe que es y lo mal que conduce.

A ver si ahora que es el año en que los políticos que quieren llegar al pódium del poder, y se interesan tanto por sus ciudadanos buscando el voto en estas múltiples Elecciones que tendremos, tienen esa visión social de que hay que resolver urgentemente estas anomalías, que arroja en casi un 60% de las muertes ocasionadas en accidentes de tráfico en carretera, porque se deben a las malas carreteras que tenemos, y que debe de ser el Ministerio, Cabildos Diputaciones y Ayuntamientos, los que estén encargados a estos menesteres los que decidan cómo solucionar esta dejadez y que la sociedad lo sufre y demandan una solución rápida.

¿Los impuestos que se pagan, no entran también para esto? Cómo se puede tener a Tenerife tan dejada en sus viales, de escándalo, bocazas, que son todos unos lengüines, mientras cada semana se visten de luto muchas familias, y estos expertos solo lo atribuyen a defectos del conductor, falsos, que son todos unos escapistas y no dan la cara por nada ni ante nada, vergüenza que no la tienen cuando no admiten que España está hecha un desastre en sus vías rodadas, y en cuanto a circular por sus carreteras es jugarse la vida, ahora eso sí, mucho sopla y mucha parafernalia de seguridad para que el contribuyente vea la efectividad que pretenden ustedes dar, pero solo pedimos más responsabilidad por parte también de la Administración Pública, pero toda la base de esa seguridad que se pretende que tenga el trafico, debería también de emanar de ustedes mismos que son los que tienen las carreteras hechas unos zorros, y siguen pasando de ellas y de los que ustedes tratan de vociferantes y torpes conductores españoles.

Salvador Barnes
doropress@gmail.com